martes, 18 de agosto de 2009

(...)

Necesitaba un minuto para perderme de mí misma.
Un minuto para mirar el techo, quizás.
No me importa ya, pasar horas así.
El tiempo no se pierde con éstos ánimos, no si sirve para recuperarse
no si sirve para pensar en qué hacer con una vida semi-estúpida con grandes toques de monotonía absurda y molesta.
El tiempo no se pierde a menos que me pusiera a hacer intentos inútiles de reírme,
aunque podría burlarme de mí misma, pero hace tiempo que dejé de hacerlo.
El tiempo me arrastra y me traga sin masticar, y otra vez me encuentro mirando al cielo
Mi cielo, quien nunca quizo revelarme ningún secreto oculto en su místico lugar,
porque yo creía, yo me aferraba ciegamente a que él y la luna poseían el elixir y la cura para tanta cosa que termina perturbándome.
Aquello que siempre fue ajeno a mi realidad, a mi tan aburrida y poco dinámica realidad.
-Pero pudo haberlo cambiado, aquello que el cielo quiso callar -
Quitarme estas ganas de dormir por años me agobia, me pesa, me supera,
Me colma, me hastía, me lastima, me hace mal al fin y al cabo.
No quiero tener que seguir así y desperdiciar unos par de minutos no es nada si pudiera arreglarlo.
Si pudiera tan sólo encontrar la clave, la posión, el hechizo, el conjuro...
pero en tan sólo unos cuantos minutos no se puede encontrar aquello que los alquimistas jamás hallaron.
No hay nada, y la nada en nada puede convertirse, " como decía un pequeño frangmento que leí de un poema que me servía para el monólogo" -eso me sonó a trabalenguas xD-

"Más la nada en nada puede convertirse,
ni sitio alguno puede del todo vaciarse"

Se acabaron otra vez los minutos, queridos lectores, ahora no puedo seguir deteniéndome en medio del camino para escribir aquí, así que continúo mi viaje nuevamente sin la piedra filosofal ni elixir alguno, y de la manera en que me miro, me encuentro más vacía y opaca que nunca, necesito pulir mis ánimos y gastar más tiempo, así que no tengo más excusa para permanecer aquí, lo lamento
pero el momento de abandonar el blog por hoy ha llegado, hasta una próxima entrada

Saluda Atte:

Gasper, K, Corazón Viajero, Lilith, Karla, y como quieran seguir llamándome.

P.D: Aquí no pueden encontrarme, pero en la ciudad de los sueños perdida en su cabeza, tal vez sí.

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