El sol ya no calentaba mi espalda como de ida
pero aún así podía ver mi sombra correr a mi compás en la pandereta
mi respiración no estaba tan agitada como antes
Las piernas pesaban un poco más
pero la fuerza provenía de la emoción interna que inundaba mis pensamientos
de lo maravilloso que se vuelven las sociedades, aun siendo tan turbias y manipuladas
encontré ahí su esencia principal, y que era remediable. Todo remediable, todo posible.
y Me sentí tan afortunada de vivir... y de llevar la vida que llevo,
que no me di cuenta que ya había corrido la mitad del camino
*Espero que mi agua haya cambiado su estructura molecular, de hecho siento como si todo estubiera mejor. Espero mantenerme así la mayor catidad de tiempo posible.
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