sábado, 12 de septiembre de 2009

Una y otra vez.

Lloré mucho. Me mordí la mano. Quise abrir una herida. Me arrepentí. Lloré otra vez. No pude llorar más. Me fui a dormir temprano. dormí 13 horas. No quería abrir los ojos. No quería levantarme. No quería seguir. Pero no sé como. Me armé de fuerzas. Y me levanté.
Caminé. Al baño. Tuve que salir. Reí. Fingí. Me armé de más fuerza. Reí.
Bufé. Maldije. Quiero dormir. Quiero llorar. Pero ya no puedo más.
Sólo quiero. Dejar de respirar. Mierda. Por un día. Sólo no mirar. Atrás. Otra vez.
Y no llorar. Una y otra vez. Una y otra vez.
Círculo del mal.
Laberiton infernal.
Deja de gritar.
Mi corazón.
Sólo llora por ti.
y no lo oirás. Porque no te permito regresar.
Porque he cerrado el ventanal. No hay vuelta atrás.
Es la cruda realidad.
El timbre deja de sonar. y tu nombre recordad. En una pesadilla.
Hay que salir ya.
De este círculo infernal.
Círculo infernal
Vicio que al final, mata.

1 comentario:

  1. Corazón Viajero:
    He comenzado un nuevo viaje. Creo que no aprendí nada nuevo en el anterior. Curiosamente, todo lo que me dijeron en el otro, yo ya lo sabía. Yo era feliz, porque hacía lo que quería y vivía sencillamente, amando más mi mundo de lo que nunca amé a nada ni a nadie. Yo también he sufrido mucho, más de lo que sepas o puedas imaginar. Seguiré sufriendo. Y dolerá, pero el dolor no es malo.
    El dolor es lo que te recuerda que sigues vivo.
    No obstante, no por eso vas a vivir en él.
    ¿Sabes? Creo que tu problema es que buscas demasiadas complicaciones.
    Aprende a disfrutar de cosas pequeñas. Tal vez el cielo no puede extenderte una mano para que la tomes, pero sí puede enseñarte un color nuevo cada día. Y tal vez tu madre y tu padre no te entiendan, pero siempre puedes pedirles un abrazo cuando te sientas sola.
    ¿Por qué finges? Tú no eres la única que sufres, pero eso tampoco quiere decir que no puedas sufrir. Abre los ojos, abraza a alguien dulcemente y llora.
    No esperes nada de ella. Ya has hablado mucho de tu dolor. Es hora de que aceptes lo que tienes y sigas adelante.
    En realidad, no es tan malo. No porque la gente no te quiera como tú quieres, ha dejado de quererte.
    Tal vez no siempre les hace feliz lo que haces, pero si están ahí es por algo y en el fondo, aunque no te lo digan o lo hagan y no te lo demuestren, te quieren.
    ¿Por qué vivir de sueños? La realidad es mucho mejor. Vestirse y caminar no debería ser duro. Sólo cierra los ojos y concentrate en la sensación de que estás viva, hasta que lo sientas en tu propio cabello.
    Yo he sufrido muchos vacíos. Muchas de las personas que han compartido mi vida, y que eran el centro de ella, murieron.
    Y el vacío que dejaron fue tan terrible que aún no lo supero del todo. ¿y?
    Esas personas no habrían querido que yo estuviera triste. Puedo llorar, pero no por eso voy a dejar de vivir.
    K, abandona la pc y abrete al mundo. Tal vez no es lo que tú querías o esperabas, pero todavía tienes una cama en la cual dormir.
    Muchos ni siquiera podemos dormir en las noches.
    La adolescencia no es una tragedia. Es dura, sí, pero en realidad es bastante sencilla. Y, también, puede ser bellísima.
    Deja de decir que te duele. Dilo si te hace sentir mejor, pero ya no vuelvas a pensar en eso.
    E, incluso si sigues sintiendo, mejor disfrútalo ampliamente.
    Un abrazo
    Victoria.

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