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Había olor a incienso en su habitación,
se notaba que habían encendido muchos, quien quiera que halla dormido allí.
Había una carta para esa persona sobre el velador
una carta que se notaba que la habían leído muchas veces.
También había un celular, y un número por llamar.
Pero se notaba que la persona que quería llamar no fue capaz de apretar el botón verde.
El piso estaba lleno de ropa, el teclado enchufado y el televisor encendido.
En el televisor estaba puesto el canal donde pasan música,
y el conductor del programa hablaba y hablaba con poca emoción.
Las cortinas estaban cerradas y eran las 2:30 pm
Se notaba que la persona que se encontraba entre aquellas tapas desordenadas no quería levantarse.
Se notaba que no pudo dormir en toda la noche
que encendió inciensos, para ver si el olor la relajaba.
Encendió el televisor, para ver si con música podría dormir
Pero no le resultó.
Entonces sacó toda la ropa del closet en busca de esa carta que se tenía prohibida leer
y tiró todo al suelo.
Entonces leyó la carta, y no pudo evitar sentirse peor
y buscó su teléfono
necesitaba hablar urgentemente con esa persona
antes de que se undiera otro poco en su debilidad.
Pero no se atrevió.
y dejó la carta y el celular sobre el velador, para acostarse nuevamente.
Dio vueltas y vueltas, desordenando la cama.
y no pudo, no pudo dormir.
Así que toda la noche se quedó mirando el techo.

Intentó pensar en muchas cosas agradables,
pero esa persona invadía sus pensamientos sin que ella lo quiciese.
Y muchas veces quiso levantarse e ir a buscar el vidrio que había encondido entre sus recuerdos.
pero sabía que no, no era eso lo que queria.
y siguió mirando el techo
a veces las lágrimas caían,
a veces se armaba de fuerzas para llamar
a veces se armaba de fuerzas para levantarse
y salir a caminar por el parque,
saludar a los niños y acariciar a los perros.
Pero no, ella
tenía un asunto con ella misma que resolver.
Ni los perros ni los niños la distraerían,
ni esa carta le haría sentir mejor.
Menos aún hablar con alguien que no entendería ni un poco.